Establecimientos gastrónomicos más buscados
Lugares de interés más visitados
Lo sentimos, no hay resultados para tu búsqueda. ¡Prueba otra vez!
Este Paraje Natural comprende el territorio de la isla de Alborán, el islote de la Nube y las aguas y fondos marinos que lo circundan, con una superficie de 26.457 hectáreas. Sus fondos, cubiertos de magníficas praderas de algas laminarias y yacimientos de coral, tienen un importante valor ecológico que hacen que las inmersiones aquí sean una auténtica delicia. La riqueza de estas profundidades, así como la virginidad de sus playas y parajes, hacen de esta zona un oasis perfecto para la práctica del submarinismo. Hay que tener cuidado, sin embargo, porque algunas zonas de estas aguas están restringidas al buceo por lo que, la opción más recomendable, es ponerse en contacto con alguna empres de submarinismo de la zona para que pueda orientarnos.
La riqueza submarina que rodea a este cabo es de un gran valor ecológico pero sobretodo paisajístico. Bajo sus aguas encontramos cuevas y paredes cubiertas de colores así como fondos rocosos y praderas interminables de posidonia oceánica. Una de las cosas que más nos sorprenderán en esta inmersión es que se han creado arrecifes artificiales con barcos de pesca hundidos, con el fin de ofrecer abrigo y así lograr una mayor diversidad de fauna y flora. Las embarcaciones están unidas por sogas para facilitar que los buceadores puedan moverse entre ellas. En la zona, además, sin superar siquiera los 30 metros de profundidad ya podemos ver morenas, congrios, pulpos y ballestas.
La Costa Brava es un territorio impresionante a simple vista y sus fondos marinos no son para menos. La zona es una reserva natural fuertemente protegida para que la naturaleza guarde todo su encanto. Se trata de una zona de relieve irregular, por lo que la inmersión nos ofrece sorpresas a cada momento. Bucear en sus aguas claras permite descubrir una fauna y flora submarina muy abundante y totalmente intactas. La Galera y el Bau del Moli son sitios ideales para empezar a conocer el mundo del submarinismo ya que tienen poca profundidad y aguas trasparentes. Mención aparte para la Illa de la Massa d’Or, la mejor reserva biológica de la zona pero también un espacio destinado a los buceadores más experimentados.
Granada también tiene mar, y está dispuesta a demostrarlo en lugares como la costa de Castell de Ferro, uno de los lugares de inmersión con más belleza de todo nuestro territorio. La principal característica d esta zona de buceo es que aquí encontramos gran número de paredes y cuevas sumergidas, muchas de ellas recubiertas de coral naranja. Se trata de unas aguas tranquilas para el buceo donde encontraremos gran número de recovecos entre los que deslizarnos. En la zona podemos ver un gran número de especies como pulpos, congrios, morenas o peces luna. Estos últimos, también conocidos como Mola Mola, son los más espectaculares de estas aguas ya que pueden llegar a los 2.000 kilos de peso y unos tres metros de longitud.
La isla de El Hierro combina su riqueza natural con aguas tranquilas y un clima cálido, lo que nos permite bucear en esta zona durante todo el año e incluso realizar inmersiones nocturnas. Las aguas que rodean la Isla son muy profundas: en algunos puntos muy cercanos a la costa se alcanzan más de 100 metros. La zona presenta variaciones acusadas de temperatura del agua en relación con la superficie, por lo que esta reserva marina tiene, además de cuevas y túneles volcánicos, gran variedad de peces tropicales, peces trompeta, peces globo y corales negros, que se convierten en un regalo durante nuestra inmersión. Los aficionados a la fotografía submarina encuentran aquí su paraíso particular.
El entorno submarino de esta isla es un verdadero tesoro biológico que le ha valido la calificación de la UNESCO de Patrimonio de la Humanidad. La visibilidad aquí es tan extraordinaria que, en función del estado del agua, puede llegar hasta los 50 metros, una distancia propia de zonas tropicales. En Las Pitiusas podemos observar gran número de cuevas, paredes y acantilados que aseguran una excelente jornada de buceo. Una de las grandes ventajas de esta costa es la temperatura del agua ya que podemos sumergirnos a lo largo de todo el año. Otro de los grandes atractivos aquí es la gran variedad de paisajes submarinos que nos permite ver, desde inmensas praderas de posidonia hasta pecios hundidos.
Se trata de una de las mejores zonas de buceo del norte de España. Debido a la gran importancia natural y arqueológica de las islas y sus fondos, han sido incluidas dentro del Parque Nacional de las Islas Atlánticas. En la cara oeste podemos hacer inmersiones de hasta 35 metros y la posibilidad de admirar congrios, anémonas de colores, pulpos y rodaballos en sus desfiladeros de piedra verticales y bancos de arena. En el lado este, encontramos grandes grietas rocosas que cobijan bancos de peces, mariscos y las increíbles rayas mosaico. Al sumergirnos en estas aguas encontramos gran número de peces e invertebrados, como congrios, rayas mosaico y pulpos.
Un paraíso en el mismo corazón del Mediterráneo capaz de seducir a buceadores de todo el mundo, que encuentran en sus aguas uno de los fondos marinos más ricos y mejor conservados de Europa. La zona, declarada Reserva Marina, tiene una gran riqueza natural por lo que las inmersiones aquí solo se pueden hacer en los puntos autorizados y señalizados. Bajo el agua encontraremos gran número de rocas, cuevas y arcos. El fondo, de media profundidad, además, está repleto de vida: doradas, dentones, barracudas, pulpos, langostas y cigarras de mar desfilan ante nosotros permitiéndonos conseguir unas fotografías submarinas impresionantes
Menorca tiene infinitos lugares donde la naturaleza ha creado paisajes de película, uno de ellos es la Reserva Marina de Fornells, donde podemos hacer increíbles inmersiones para disfrutar de una abundante vida submarina. Al tratarse de un espacio protegido, algunos lugares están restringidos para el buceo. El gobierno balear ha dividido las aguas en tres zonas y sólo permite las inmersiones en la tercera de ellas, la Zona C, con autorización previa. El paisaje de la costa es salvaje y con sus playas naturales permite un perfecto descanso para toda la familia. Hay numerosas cuevas como Campanario, Fossil o Pozo de la Luna que nos sorprenderán por sus estalagmitas, diminutos y enigmáticos fósiles o una curiosa cámara de aire.
Sinónimo de viento y muy conocida por los practicantes del windsurf, Tarifa se ha convertido en los últimos años en un destino predilecto por los submarinistas. Se trata de uno de los pocos lugares de España donde se puede ver tortugas, además de otro tipo de especies como pulpos, rayas o incluso delfines. Sin embargo, no será esto lo que más nos impresione de nuestra inmersión, sino el Pecio de San Andrés, un antiguo barco de vapor hundido. Al explorarlo nos encontramos una pared de 18 metros llena de madréporas, centollos y Tres Colas, el pez lugareño. Es importante que, antes de cualquier inmersión aquí tengamos en cuenta el estado de las mareas y el viento.